Vladimir Holan. (Praga, 1905-1980.) Vivió un encierro voluntario hasta su muerte. Fue censurado y obligado a un silencio público por las autoridades de su país de ese entonces, y desde 1941 se dedica totalmente a la poesía. En los años sesenta vuelve a ser publicado. Algunos libros: Soldados del ejército rojo, Avanzando, Pero existe la música. Dolor, Una noche con Hamlet, Historias, Toscanas.
"Llegó el tiempo de callar. Existe la mordaza y existe también la cruel pregunta ¿Porqué escribir? Hay momentos que pueden durar años, en que al hombre no le queda sino hablar consigo mismo". Si el hombre come solo y pone el oído atento con horror medular empezará a comprender de pronto qué es la tierra. No la tierra volcada, sino la esparcida con la mano. La que está en lo más hondo, como el cuerpo enterrado, es indiferente al resultado de las batallas. Y la que está en la superficie, como el lenguaje, y el lenguaje como espejo del alma, desea de pronto el aguardiente de los guardas del cementerio...