Gioconda Belli. Nicaragua, 1948. Narradora y Poeta. Miembro Academia de La Lengua de Nicaragua. Premio Internacional de Poesía Ciudad de Melilla, 2006. Premio Bellas Artes de Francia, 2014. Poemarios: Sobre la grama, 1972. Línea de fuego, 1978. Truenos y arcoiris, 1982. Apogeo, 1997. En la avanzada juventud.
¿Qué sos sino un triangulito de tierra perdido en la mitad del mundo? ¿Qué sos sino un vuelo de pájaros guardabarrancos cenzontles colibríes? ¿Qué sos sino un ruido de ríos llevándose las piedras pulidas y brillantes dejando pisadas de agua por los montes? ¿Qué sos sino pechos de mujer hechos de tierra, lisos, puntudos y amenazantes? ¿Qué sos sino cantar de hojas en árboles gigantes verdes, enmarañados y llenos de palomas? ¿Qué sos? sino dolor y polvo y gritos en la tarde, -"gritos de mujeres, como de parto"-? ¿Qué sos sino puño crispado y bala en boca? ¿Qué sos, Nicaragua para dolerme tanto? NICARAGUA Tantas veces me he propuesto olvidarte como si fueras un amante cruel de esos que le cierran a uno la puerta en las narices O uno de aquellos que cuanto más se aman más olvido prodigan Pero nada de lo que hago lo consigue Viene el verdor la lluvia el viento el revoloteo de los papeles en las calles el roble derramando sus flores como cáscaras de seda en las aceras el rostro del chavalo con el trapo su sonrisa que cruza y trasciende la pobreza Viene el atardecer sobre el perfil puntiagudo del volcán a lo lejos las nubes derramando pintura roja y púrpura sobre el cielo el hablar deslenguado rápido juguetón de la gente y todo lo que maldigo y desdigo de vos se me deshace y me irrumpe el amor como si me corrieran caballos en el pecho y te contemplo atravesada de ceibos y corteses de madroños caobos y palmeras y te amo patria de mis sueños y mis penas y te llevo conmigo para lavarte las manchas en secreto y susurrarte esperanzas y prometerte curas y encantos que te salven Palabras digo puesto que son ellas la argamasa de mi vida y a punta de palabras te imagino una y otra vez renacida genial, despojada de cuanta polilla te corroe día a día los cimientos Arranco de tu pelo a los que te venden te roban y te abusan Te cuento cuentos en la esquina de mi almohada Te arropo y te tapo los ojos para que no veas los verdugos que llegan a cortarte la cabeza. Tierra paisaje Yo moriré, morirán mis angustias pero vos seguirás anclada en el mismo lugar acurrucando mis memorias y mis huesos.