Czeslaw Milosz. Polonia (1911-2004). Premio Nobel de Literatura 1980. Durante la Segunda Guerra Mundial, trabajó para la Resistencia de Varsovia, difundiendo libros y folletos contra el nazismo. Publicó 21 libros de poesía. Vivió en Paris, Polonia y desde 1960 en Los Estados Unidos, donde fue Profesor de Literatura Eslava.
Nada más Debería contar alguna vez cómo ha cambiado Mi opinión sobre la poesía y por qué Me considero hoy uno entre tantos Comerciantes y soldados del Imperio del Japón Que componen los versos sobre la flor de cerezo, Los crisantemos y la luna llena. Si yo pudiera describir a las cortesanas de Venecia, Cuando en el patio con un ramito incitan al pavo, Y de la prenda de seda, de una cinta perlada Librar los senos grávidos, la marca rojiza en el vientre, donde la hebilla Por lo menos así como lo ha visto el capitán de los galeones Que llegaron aquella mañana, cargados de oro; Y si pudiera al mismo tiempo, en el cementerio donde el graso mar lame el portón, Encerrar sus pobres huesos en una palabra más constante que el último peine Cuando en el polvo, bajo la losa, espera la luz solitario Entonces no dudaría. De la materia tenaz ¿Cuánto se puede lograr? Nada, tan sólo la belleza. Deben bastarnos entonces, la flor de cerezo Y los crisantemos y la luna llena Montgeron, 1957