Li Bai, (Li Po). Dinastía Tang. 701-762. Poeta reconocido hasta nuestros días, como uno de los más grandes poetas chinos. El emperador Suan Tsong fue su protector. Asociado a la clase pudiente. Nunca hizo los exámenes imperiales, como era lo usual en su tiempo. Deslumbraba a quienes lo conocían por su magnetismo y elocuencia y poesía. Vivió en una montaña y conformó el grupo: “Los seis ociosos del arroyo del bambú” que se dedicaban a la poesía y al vino. Vivió errante por diez años. Conoció la pobreza y la guerra porque aunque nació y creció en la Edad de Oro de la Dinastía Tang, luego por problemas de poder, el norte de china fue azotado por una gran hambruna. Li Po, se hizo Taoísta. Fue desterrado, pero un decreto de amnistía lo devolvió a su país, donde murió a los 62 años.
El que vive es un viajero en tránsito, El que muere es un hombre que torna a su morada. Un trayecto muy breve entre el cielo y la tierra, y ya no somos más que el viejo polvo de los diez mil siglos. El conejo en la luna busca en vano el elixir de vida. Fu Sang, el árbol de la inmortalidad, se ha desmoronado en un montón de leña. El hombre muere; sus blancos huesos enmudecen Cuando los verdes pinos sienten el retorno de la primavera. Miro hacia atrás y suspiro; miro hacia delante y suspiro. ¿hay algo sólido en la vaporosa gloria de la vida? *** PLÁTICA EN LAS MONTAÑAS Yo soy como un melocotonero que florece en hondo pozo. ¿Hacia quién puedo mirar y sonreír? Tu eres la luna que reluce en el cielo. Al pasar me miraste durante una hora; luego te fuiste para siempre. La espada con la hoja más fina no puede cortar el agua del río en dos para que deje de correr. Mi pensamiento como el agua del río corre y te sigue siempre.